La Hermandad del Santísimo Cristo de la Buena Muerte y María Santísima de la Amargura celebró ayer uno de los actos centrales del Cincuentenario de Misericordia y Amor en el que se conmemoran los cincuenta años de la bendición de sagrada imagen de la Virgen, la Misa de Acción de Gracias.
Antes, la imagen era trasladada desde la parroquia del Gran Poder hasta la Ermita, acompañada por la Junta de Gobierno de la Hermandad, hermano y hermanas, fieles y devotos y con el rezo del Santo Rosario de fondo.
Una vez llegaban al exterior de la parroquia de Nuestro Padre Jesús Nazareno del Antiguo Grupo Escolar Nuestra Señora de los Ángeles (la Ermita), sede actual del Consejo de Hermandades y Cofradías de la localidad se celebró la Solemne Misa de Acción de Gracia oficiada por el Rvdo. Héctor Hugo Vásquez y cantada por el Coro de la parroquia del Gran Poder.
Representando al Ayuntamiento asistió el alcalde, Jenaro Orta junto a los Portavoces de los distintos grupos políticos de la Corporación Municipal. Presentes también el Hermano Mayor de la Hermandad, Ramón Contreras y los miembros de su Junta de Gobierno, el presidente del Consejo de Hermandades, Javier Castro y los Hermanos y Hermanas Mayores de la distintas Hermandades de Penitencia y Gloria y Grupos Religiosos y Parroquiales de la localidad.
En el transcurso de la Ofrenda, se le impuso a la Virgen la Medalla Cruz Blanca al Mérito donada por la familia del Comandante de la Escala Básica de Caballería y hermano fundador de la Cofradía, Antonio Villaseñor Peñate, que se le concedió en 1961 por el rescate de personas en las inundaciones de Sevilla.